El sistema filosófico más perfecto jamás pensado.

Compártelo:

Nadie sabe aún, que el sistema filosófico más perfecto jamás pensado ya se escribió, pero fue tan dificultoso y minimamente conceptualizado, que entre sus propiedades está la de no poder ser asimilado en conjunto.

Y, es que pareciera que su escritor incluso le llevaba la contraria a Heidegger 200 años antes de que naciera. El texto en conjunto solo puede ser comprendido en sus individualidades, es decir, en dos afirmaciones concretas y correlativas tales son: la necesaria conceptualización de unas definiciones primarias, y el siguiente esfuerzo de repetir y diferenciar de ellas, otras variables mediante el pensamiento racional.

Consiguiendo afirmar que : "Si imaginamos que alguien afecta de alegría a una cosa que odiamos, seremos afectados también de odio hacia él. Si, por el contrario, imaginamos que afecta a esa cosa de tristeza, seremos afectados de amor hacia él". "Un afecto que es una pasión deja de ser pasión tan pronto como nos formamos de él una idea clara y distinta". "En la medida en que el alma entiende todas las cosas como necesarias, tiene un mayor poder sobre los afectos, o sea, padece menos por causa de ellos".

Y entendiendo alma y cuerpo como una y la misma cosa, basó este manual -Ética demostrada por orden geométrico, en la enunciación de las "razones" que hacen a los hombres actuar, y en los afectos que ilusionan la razón de los hombres haciendo que estos sean gobernados por pasiones.

Pero igual, quien lea e intente comprender, no podrá idear crítica alguna en la base del sistema, pues no hay base alguna, ni pirámide ni estructura que gobierne los constructos que la forman. Ni un ideal, ninguna verdad dominante, ningún comienzo ni final. Este es el sistema filosófico más perfecto jamas pensado, y solo lo forman conceptos concretos y claramente enunciados. Es en Spinoza -dicen algunos y yo asiento, donde nace la filosofía del futuro, donde el concepto gana la batalla al sistema. Pues, como saben, con conceptos se creó el sistema más perfecto jamas pensado, evidenciando que era inservible como un conjunto unificado.

De esto hablaba Deleuze cuando dijo que Spinoza es el príncipe de los filósofos, y es que, es el filósofo inmanente por excelencia.


Pudes leer a Deleuze hablar sobre el concepto de inmanencia.






                                                      
Compártelo:

Publica un comentario: